Es una empresa comprometida con la naturaleza y usan energía verde, es decir, energías renovables que no contaminan, cuyo modo de obtención y uso se hace de manera que no emite productos que puedan incidir negativamente en el medio ambiente.
Una de sus cervezas orgánicas es la BUDELS HONING, cerveza de miel de 4,5% grados elaborada con materias primas totalmente naturales.
Aparece ambar con reflejos color oro y con transparencia media. La corona una espuma blanca que desaparece en poco tiempo.
Al olerla se nota sobretodo malta y miel, no ofrece mucha complejidad, y sigue la misma senda en boca con sabor a malta y a miel dejando un regusto como de caramelo y por supuesto de miel (los Werters Original vinieron a mi mente al instante).
Es muy ligera al principio, un poco aguada incluso, y luego parece ganar en peso por su sensación dulcificada aunque llega a empalagar un poco.
Viene en formato de 30 cl.
Esta BUDELS HONING en concreto caducaba este mismo mes de enero. Puede que tomada acabada de producir mejore, ya que las cervezas ecológicas suelen tener una vida más corta con todas sus propiedades pero lo cierto es que me ha dejado un tanto indiferente.
Es por ello que me parece una cerveza justita, aunque tampoco creo que tuvieran muchas más pretensiones que las de hacer una cerveza con sabor a miel, sin más complejidades, y eso está aqui, pero una vez probados varios tragos no ofrece nada más y se hace repetitiva.